*Reconoce senador Roberto Gil Zuarth, del PAN, en sesión de Asamblea Juventud Constituyente

*Inclusión laboral, gobierno abierto, pueblos, barrios y comunidades indígenas, así como participación político- electoral del sector, entre los temas que se abordaron.

*También asistieron Raúl Cervantes Andrade, del PRI  y Armando Ríos Piter, del PRD

El proyecto de Constitución Política para la Ciudad de México deja mucho que desear y tiene muchos inconvenientes, reconoció el senador Roberto Gil Zuarth, del Grupo Parlamentario del PAN, durante un intercambio de puntos de vista en la sesión de la Asamblea Juventud Constituyente, que organizaron el Senado de la República y el Movimiento MOTIVA, en la que también estuvieron diputados constituyentes.

Los temas abordados en  el evento fueron inclusión laboral, gobierno abierto, pueblos y comunidades indígenas, así como la participación político-electoral para este sector de la población; en un intercambio de opiniones con jóvenes de la Ciudad de México sobre los alcances de la Constitución Política sobre esos rubros.

Gil Zuarth externó que uno de los elementos de la discusión constitucional es entender qué significa ser habitante de la Ciudad de México, qué principios y qué valores debe contener la Carta Magna de la entidad, así como un diseño mínimo constitucional para la discusión.

En tanto que el senador Cervantes Andrade, del Grupo Parlamentario del PRI, subrayó que toda sociedad democrática tiene que ser deliberativa, generar ciudadanía y el debate de las ideas para el mejoramiento continuo de los derechos económicos, culturales y políticos.

Por su parte el también integrante de la Cámara Alta Armando Ríos Piter, del Grupo Parlamentario del PRD, destacó que nuestro sistema de partidos está colapsado y quien plantea lo contrario quiere “seguir viviendo en la misma lógica inercial de un régimen que hoy no le está dando respuestas a la gente”, que tiene qué ver con un esquema de partidos políticos “que sea ha consolidado como un monopolio”.

El senador por el Partido Acción Nacional (PAN),  Roberto Gil Zuarth reconoció también que “no hemos entrado aún a la discusión sobre el modelo de organización política de la Ciudad de México” y advirtió que el proyecto para la Constitución tiene muchos inconvenientes desde el punto de vista técnico y se trata de una norma con problemas de constitucionalidad bastantes serios”.

Agregó que lo que va a discutir la Asamblea Constituyente es la conformación de las instituciones fundamentales de la Ciudad de México para proveer bienes y prestar servicios públicos, por lo que es fundamental analizar “qué es lo que se quiere petrificar en el tiempo”, el consenso básico que no queremos que se mueva por los cambios coyunturales de cada cuatro año.

En tanto que el senador Armando Ríos Piter, del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), destacó que “nuestro sistema de partidos está colapsado y quien plantea lo contrario quiere “seguir viviendo en la misma lógica inercial de un régimen que hoy no le está dando respuestas a la gente”, que tiene qué ver con un esquema de partidos políticos “que sea ha consolidado como un monopolio”.

Dijo que uno de los debates más importantes es elevar la participación político-electoral de los ciudadanos, principalmente de los jóvenes, y en este sentido adelantó que presentará una iniciativa para que el derecho a votar sea a partir de los 16 años.

Por su parte Gabriela Hevia, presidenta de la Asamblea Juventud Constituyente, refirió que los jóvenes representan casi un tercio de la población de la Ciudad de México, pero en este sector se registra la menor participación electoral y política., un problema que podría derivarse por el divorcio entre la política y la juventud.

Expresó que es necesario un diálogo y lenguaje común, fácil de entender, para reducir la brecha entre jóvenes y políticos.

A su vez, la asambleísta Sofía González asentó que en el discurso político se habla siempre de que los jóvenes son el presente y futuro de nuestro país, pero en la realidad no son considerados en la toma de decisiones.

Por eso, agregó, la Constitución de la Ciudad de México es una oportunidad para dar la importancia que requieren los derechos de las juventudes.

El asambleísta Leonardo Morales refirió que en esta entidad tres de cada 10 jóvenes sufren algún tipo de violencia, pero no se ha hecho nada para revertir esta situación. Agregó que violencia y corrupción son dos factores que vulneran el derecho a la paz de la capital.

En respuesta, Raúl Cervantes Andrade, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), reiteró que de lo que se trata es de resolver los conflictos de la capital del país y en este sentido lo que se establezca en la norma constitucional de esta entidad tendrá que ver con servicios públicos.

Roberto Gil Zuarth asentó que no se requiere una Constitución para alentar la participación de los jóvenes ni tampoco para crear una Secretaría de la Juventud dentro de la administración Pública centralizada, porque “no necesitamos a la Constitución de la Ciudad de México para diseñar algunas instituciones que nos permitan responder a los desafíos de nuestra convivencia”.

Armando Ríos Piter comentó que construir la Constitución de la Ciudad de México puede tener varios puntos de vista: “un asunto más, un espacio para deliberar, para sacar un producto legislativo o convocar para que la gente vuelva a creer en que hacer la ley y las instituciones es algo pertinente en este momento”.

Por último, José Francisco Rubio enfatizó: “la dignidad y el bienestar de la persona tiene que estar en el lugar protagonista de la discusión y el diseño constitucional. No queremos, como juventudes, espacios momentáneos y efímeros”, asentó.