México DF.-La Secretaria de Marina Armada de México rechazó aceptar las dos recomendaciones de la Comisiona Nacional de Derechos Humanos (CNDH), emitidas en el mes de diciembre por el uso arbitrario de la fuerza pública al disparar sus armas de fuego en contra de vehículos civiles cuyos conductores perdieron la vida
En la Recomendación 72/2010, la CNDH observó que la noche del 16 de diciembre de 2009 elementos de la Secretaría de Marina dispararon sus armas de fuego en la colonia Del Empleado, en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, y varios proyectiles alcanzaron la camioneta en que viajaba una persona, quien falleció a causa de las lesiones provocadas.
Por lo que respecta a la Recomendación 83/2010, este Organismo nacional observó que la madrugada del 11 de diciembre de 2009 servidores públicos de la Secretaría de Marina realizaron disparos de arma de fuego en contra del vehículo que conducía una mujer que salía de su domicilio en el fraccionamiento Los Limoneros en Cuernavaca, Morelos, quien perdió la vida en ese lugar.
En ambos casos, la CNDH concluyó que los elementos de la Marina incurrieron en uso arbitrario de la fuerza pública y vulneraron en perjuicio de los agraviados los derechos a la integridad personal y al trato digno, así como a la legalidad y seguridad jurídica.
Las evidencias recabadas permiten afirmar que al realizar los operativos, los elementos navales no realizaron una adecuada planeación y desprotegieron la integridad física de las víctimas, ya que no obstante que señalaron que sus acciones fueron en legítima defensa, con el ánimo de defenderse de presuntos integrantes de una banda delictiva, en ningún momento adoptaron las medidas necesarias para salvaguardar la seguridad de personas ajenas a los operativos.
Es pertinente anotar que en el primer caso el vehículo presentó 53 disparos y, en el segundo, más de 60, lo que de ninguna manera puede considerarse disuasivo y revela, sin lugar a dudas, un uso arbitrario de la fuerza pública.
Los expedientes contienen las evidencias que fueron valoradas y se tomaron en cuenta para la conclusión, poniéndose énfasis en aquellas que resultaron determinantes.
En esas recomendaciones, la Comisión Nacional solicitó a la Secretaría de Marina se tomaran las medidas necesarias para reparar los daños, indemnizar a los familiares de las víctimas y proporcionarles apoyo médico, psicológico y de rehabilitación y que se colaborara en la presentación y trámite de la queja y denuncia de hechos que este Organismo nacional promoverá ante la Unidad de Inspección y Contraloría General de la Marina, la Procuraduría General de la República y la Procuraduría General de Justicia Militar, a fin de que los hechos no queden impunes.
También exhortó a esa dependencia a proporcionar a la CNDH informes completos y precisos, a efecto de que cuente con evidencias que permitan conocer la verdad histórica y jurídica de los hechos, ya que durante la integración de los expedientes, esa Secretaría omitió responder de manera puntual y completa a las solicitudes de informes que le envió este Organismo protector de derechos humanos.El rechazo a las recomendaciones muestra, en este caso, una actitud de desinterés en la protección de los derechos humanos de las personas ajenas a los operativos que realizan, ya que no obstante que durante las investigaciones quedó acreditada su participación en los hechos, se negaron a asumir la responsabilidad que tuvieron por el fallecimiento de dos civiles que no pertenecían a ninguna organización criminal y que fueron víctimas de la falta del deber de cuidado por parte del personal naval.
Durante el 2010, la Comisión Nacional de los Derecho Humanos recibió 198 quejas en contra de servidores públicos de la Secretaría de Marina, principalmente por cateos ilegales, detenciones arbitrarias, tratos crueles e inhumanos, tortura y privación de la vida.
En ese año, este Organismo nacional dirigió a la Secretaría de Marina seis recomendaciones, cifra que supera las dirigidas a esa autoridad del año 2006 al 2009, lo que muestra que el personal de esa dependencia ha multiplicado exponencialmente el número casos en que ha incurrido en hechos violatorios a derechos humanos.
De las recomendaciones emitidas en el año 2010, la Secretaría de Marina únicamente ha aceptado dos, quedando pendiente una de contestar.
En su momento, tampoco aceptó la Recomendación 17/2010, relacionada con el caso en el que por falta de previsión se reveló el nombre de un marino y con motivo de ello perdieron la vida sus familiares.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos es absolutamente respetuosa de las instituciones, sin embargo, cumple su misión constitucional de señalar a servidores públicos que se apartan de sus deberes y exigir la responsabilidad institucional que esta situación conlleva.