Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- La Coordinación Estatal de Protección Civil de Oaxaca (CEPCO) emitió una serie de recomendaciones ante la ola de calor o altas temperaturas que se han registrado en la entidad a fin de evitar daños en la salud.
Recomienda tomar más líquidos de los que acostumbra, no esperar a estar sediento para beberlos; evitar la ingestión de líquidos con cafeína, azucarados o bebidas alcohólicas, ya que hacen perder más líquidos corporales y consumir agua hervida, para desinfectarla, agregar dos gotas de cloro por cada litro de agua o una gota de plata coloidal por cada dos litros y dejarla reposar durante 30 minutos antes de beberla.
Usar ropa ligera, de colores claros y utilizar sombrero o sombrilla para protegerse del sol; Evitar exponerse al sol durante las horas de mayor radiación (entre las 11:00 y 15 horas) y elegir las primeras horas del día para llevar a cabo actividades al aire libre y deportivas.
Cubrir las ventanas que reciben la luz del sol con persianas, cortinas o periódicos, lo que ayuda a disminuir hasta el 80 por ciento el calor en el interior de la casa y nunca permanecer en un vehículo estacionada o cerrado.
Consumir alimentos inmediatamente después de su preparación, para evitar que estos se descompongan; Lavar con agua y jabón las frutas y verduras que se comen crudas y en caso de que los labios y piel estén secos, solicitar gratuitamente Vida Suero Oral en cualquier unidad del Sector Salud, que se prepara disolviendo el contenido de un sobre en un litro de agua hervida o desinfectada.
Una ola de calor es un periodo prolongado de calor extremo y a menudo va acompañada de una alta humedad. Estas condiciones pueden ser peligrosas e incluso poner en peligro la vida de las personas que no toman las precauciones adecuadas.
El calor mata al empujar el cuerpo humano más allá de sus límites. En condiciones de calor extremo y alta humedad, la evaporación se ralentiza y el cuerpo debe trabajar más duro para mantener una temperatura normal.
En consecuencia, las personas que viven en áreas urbanas pueden estar en mayor riesgo por los efectos de una ola de calor prolongada que aquellos que viven en áreas rurales.
El asfalto y el concreto también pueden almacenar el calor por más tiempo y gradualmente liberan calor por la noche, lo que puede producir temperaturas nocturnas más altas conocidas como el “efecto isla de calor urbano”.