* En el bicentenario del natalicio del músico catalán, la directora general, Lucina Jiménez, agradeció la participación institucional en este homenaje
Ciudad de México.- La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través del Conservatorio Nacional de Música, recordaron a Jaime Nunó (1824-1908), compositor del Himno Nacional Mexicano, al celebrarse el bicentenario de su natalicio.
“Reconocer a Nunó es reconocernos a nosotros y a nosotras, pero también generando la posibilidad de investigar todavía más ampliamente su legado”, afirmó Lucina Jiménez López, titular del Inbal, -quien presidió la ceremonia, acompañada de Silvia Navarrete, directora del CNM; Lleïr Daban, delegado del Gobierno de Cataluña en México y Cristian Cantón, autor de la biografía de Jaime Nunó -.
“Cuando los vínculos culturales (México-Cataluña) son tan profundos y tan grandes, no bastan dos centenarios para que la memoria se convierta en un sentido de contemporaneidad en esos vínculos, es por eso que hoy celebramos la colaboración entre las agrupaciones del Conservatorio Nacional de Música y las de la Facultad de Música de la UNAM, dos entidades que trabajan por la formación artística de las nuevas generaciones y que dan la posibilidad de unirse con grandes profesionales, como lo son los Solistas Ensamble de Bellas Artes”.
En tanto, Lleïr Daban resaltó la relevancia de Jaime Nunó como un puente cultural entre Cataluña y México, recordando que, a pesar de su origen, su legado es más conocido en México. Y anunció la creación de un comité en Cataluña para promover su figura y destacó la inauguración de una exposición biográfica en el Museo de la Cancillería.
Asimismo, externó su alegría por la celebración conjunta del bicentenario y agradeció la colaboración del Inbal, mediante el Conservatorio Nacional de Música, así como la presencia de Cristian Cantón, especialista en la figura de Nunó, quien compartió su conocimiento sobre el músico catalán.
En el magno concierto, realizado en el Auditorio Silvestre Revueltas del CNM, se resaltó que su creatividad musical fue extensa y comprendió multitud de géneros. La amplitud de su catálogo, el cual es difícil de medir, llega a las 600 obras. Según su biógrafo, Cristian Cantón, “un indicio lo encontramos en la portada del vals Adiós a México, que Nunó compuso en 1901, donde leemos la inscripción: Op. 521”.
A su vez, Solistas Ensamble de Bellas Artes, bajo la dirección de Christian Gohmer, interpretó algunas obras inéditas: Our Fatherland, texto de Linda de K. Fulton; Ah, how Sweet it is to Love, texto de John Dryden; The Days That are no More, texto de Alfred Tennyson; Song of the Brook, texto de Alfred Tennyson; Come to the Land of Peace, texto de J. Montgomery; Salvation, texto de Rev. J. Watts; Adiós a México, vals lento, God is Love, Santo, Ave María y Te Deum.
Los asistentes al recinto del Inbal también apreciaron la pieza Canto a la paz –con letra de Juan de Dios Peza–, la cual estuvo interpretada por los Coros de niños del Conservatorio Nacional de Música, la Escuela Superior de Música y la Facultad de Música de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El concierto culminó con el Himno Nacional Mexicano, cuya letra se debe a Francisco González Bocanegra, con la interpretación de Solistas Ensamble, los Coros de niños y la Orquesta Sinfónica del CNM, bajo la dirección artística del maestro Eduardo Álvarez.
