México, DF.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), que preside Raúl Plascencia Villanueva, reitera la necesidad de tomar medidas que mejoren las condiciones de estancia e internamiento de la población penitenciaria en cumplimiento a los principios contenidos en nuestra Constitución y los Tratados Internacionales.
El pasado 23 de julio, derivado de una riña en el Centro de Readaptación Social Varonil de Nogales, Sonora, resultaron 12 internos y tres elementos de seguridad lesionados.
La CNDH a través del Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2012, ha dado cuenta que en el Centro de Readaptación Social Varonil de Nogales, se detectó la existencia de autogobierno, privilegios y cobros por la asignación de estancias y planchas para dormir.
Aunado a ello, existe insuficiencia de personal de seguridad y custodia, falta de protocolos para atender incidentes violentos; ineficiencia para la remisión de quejas a organismos de protección de derechos humanos; y deficiencias en el proceso de imposición de sanciones disciplinarias que no respetan el derecho de audiencia, entre otras.
Asimismo, en la visita realizada por parte de visitadores de la Comisión Nacional durante el 2013, se observó hacinamiento, áreas de privilegios, objetos y substancias prohibidas, internos que ejercen violencia o control sobre el resto de la población, todo ello resultado del autogobierno que prevalece.
Para la CNDH resulta preocupante que las condiciones de los centros penitenciarios no mejoren, por el contrario se incrementen las deficiencias respecto del 2013, como es el caso del Centro de Reinserción Social Varonil de Nogales, pero también otros existentes en esa entidad y cuyas condiciones de internamiento y trato, constituyen violaciones a los derechos humanos de las personas privadas de la libertad.