El Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA) y el municipio de Oaxaca de Juárez firmarán un convenio de colaboración para realizar una serie de proyectos a fin de rescatar la belleza y armonía arquitectónica del Barrio de Xochimilco, uno de los más antiguos y visitados por su gran riqueza histórica, artesanal y religiosa.
La realización de estos proyectos se da en el marco del programa Ciudades Mexicanas del Patrimonio Mundial, que busca rescatar y potenciar la belleza de esta zona de la ciudad para mejorar la calidad de vida de las personas que habitan este tradicional barrio oaxaqueño y para deleite de las y los visitantes, nacionales y extranjeros.
Los proyectos que se realizarán son: “Mejoramiento Urbano de la Calle Rufino Tamayo”, “Mejoramiento Visual de la Calle Rufino Tamayo y José López Alavés” y “Mejoramiento de la Imagen Visual del Acueducto de Xochimilco”.
Además de los proyectos de mejoramiento de pavimento de los callejones Alarifes, Boca del Monte, Aldama, Félix Díaz y Morelos del Barrio de Xochimilco.
Xochimilco es un barrio colonial con mucha tradición artesanal, sus tapetes y manteles, hojalatería y cuchillería, son de renombre internacional. Además su cultura, costumbres y tradiciones religiosas lo convierten en un rincón lleno de historia.
Formado en 1486, sus calles tradicionalmente empedradas y angostas; en su mayoría, serán renovadas mediante este programa. El Barrio es también ampliamente conocido por el acueducto de San Felipe construido a mediados del siglo XVIII, desde entonces, hasta después de 1940 surtió de agua a la ciudad capital, este espacio también será atendido a través del programa del FONCA.
Oaxaca ha destacado en el turismo a nivel internacional, gracias a la riqueza de sus tradiciones, la extensa variedad de su comida típica y su exquisita arquitectura que empapa todos sus rincones, por lo que el rescate de este emblemático lugar también es trascendental para renovar la calidad de vida de la ciudad y sus habitantes, además de conservar la belleza arquitectónica que logró que en 1987 la UNESCO la declarara Patrimonio de la Humanidad.