En el transcurso del día se espera que los brigadistas y personal militar que se encuentran trabajando en Santa María Tlahuitoltepec localicen los cuerpos de las otras personas, siete, que se han dado por desaparecidas y que habitaban en una de las dos viviendas que fueron destruidas por el alud que se registró el martes 28 por la madrugada.
Lo anterior lo reportó Luis Ignancio Zárate Carballido, jefe del departamento de planeación y logística del Instituto Estatal de Protección Civil Oaxaca (IEPCO).
Las condiciones del terreno siguen prácticamente en el mismo nivel de saturación de agua por lo que aun hay riesgo de que se presenten derrumbes y desgajamientos de laderas en Tlahuitoltepec.
Dijo que se hace necesaria la reubicación de unas cien viviendas, que presentan diferentes grados de afectación en sus estructuras, por lo que se requiere reubicar a unas 400 personas de manera urgente.
“Una casa más tuvo que ser demolida porque ello representaba un riesgo para el personal que realiza los trabajos de localización de las personas que se han dado por desparecidas”, aseguró.
Reconoció que la difusión de los riesgos que existen se hace solo en español cuando en Oaxaca existen 16 pueblos indígenas y cientos de variantes de las lenguas originarias de las etnias que pueblan Oaxaca.
Asimismo, no se cuenta con un sistema de comunicación alternativo que garantice la comunicación con los municipios de la entidad, ya que los únicos medios de comunicación son los tradicionales incluyendo la telefonía comercial.
Dijo Zárate Carballido que parte del problema que existe en Oaxaca es que no hay reglamentos de construcción ni una idiosincrasia de la población para construir sus viviendas en zonas seguras, ya que no tienen conocimientos para tomar en cuenta que habitan comunidades que se encuentran por arriba de los dos mil metros sobre el nivel del mar y en laderas con pendientes de más de 30 grados.
Recordó que una tragedia similar a la ocurrida en Tlahuitoltepec, se registró hace 19 años, 1991, en el poblado La Luz de Ixtlán, una localidad enclavada en la Sierra Juárez de Oaxaca, donde perdieron la vida 12 personas