Miguel Ángel Schultz
A pesar de haber concluido el paro de labores en el sector salud de Oaxaca, el pasado lunes 14, se viven situaciones críticas, particularmente en el Hospital Civil “Doctor Aurelio Valdivieso” de la ciudad de Oaxaca, donde los trabajos de mantenimiento y remodelación se suspendieron, pese a los acuerdos que llegaron para levantar el paro, con las autoridades estatales y federales y con la dirigencia sindical de la Sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud, explicó el dirigente de la Subsección 7, Carlos Pérez Bautista.
Es tal la crisis en el sector salud de Oaxaca, que el gobernador electo, Alejandro Murat Hinojosa, ha salido a declarar que existen más de 40 obras suspendidas en este rubro, que tan sólo en el Seguro Popular, se requieren 400 millones de pesos, para poder atender las necesidades básicas de salud de las y los oaxaqueños, por lo que no habrá impunidad y se investigará el desvió de recursos.
El nosocomio, el más importante de Oaxaca, tiene 50 años de haberse construido, cuando la población era de poco menos de dos millones de habitantes, por lo que tenía una capacidad de 180 camas; hoy opera con 220, las cuales son insuficientes para atender las necesidades de una población cercana a los cuatro millones de habitantes en el estado.
En el año 2015 se iniciaron las remodelaciones con un costo de 110 millones de pesos, de los que 60 millones eran para la obra física y 50 millones para equipamiento de las áreas de cuidados intensivos neonatales, que es donde se atienden a los recién nacidos con patologías graves. También se paró en su totalidad la edificación del área, donde se atienden a las pacientes de parto y cesáreas.
En un primer momento, se dio una mesa de negociación el año pasado, cuando se firmó una minuta de acuerdo con el gobernador Gabino Cué Monteagudo, en la que fijaba el 30 de abril pasado la inauguración de las remodelaciones hospitalarias, pero no fue posible. Ahí también le enteraron al mandatario del desvió de recursos por 500 millones de pesos, del pago de prestaciones a terceros de los 13 mil 500 agremiados a la Sección 35 del SNTSS, por lo que el ejecutivo siempre tuvo conocimiento de lo que ocurría dentro de la Secretaría de Salud.
En mayo pasado, se volvieron a reunir los representantes gremiales con Cué Monteagudo, donde se acordó que sería el próximo 30 de noviembre la fecha de entrega, pero eso no será posible, porque las obras quedaron suspendidas por falta de pago al constructor.
El otro gran problema del Hospital Civil, es el desabasto de medicamentos, de material de curación e insumos, familiares de los pacientes se ven obligados a conseguir todo lo que haga falta, por lo que están solicitando una reunión con el Seguro Popular para ver cómo se resuelven las carencias que están viviendo.
La crisis en el sector salud de la entidad, se ve agravada por la falta de recursos económicos y el fin de sexenio de Cué Monteagudo, sobre quien pesan severas críticas y señalamientos de la desviación del presupuesto, por lo que decenas de proveedores, prestadores de servicios y beneficiarios de programas sociales exigen el pago de sus adeudos, con marchas y bloqueos de calles y carreteras.
Las protestas de los trabajadores del sector salud de Oaxaca iniciaron prácticamente desde el inicio de la actual administración, que se fueron volviendo cada vez más frecuentes, hasta llegar al paro general que se inició el 20 de octubre pasado. Ante el desvío de recursos por más de mil millones de pesos, el pago a terceros de las prestaciones de los trabajadores, como son cuentas del fondo para Pensionissste, de Fovissste, pagos de préstamos, financieras o aseguradoras, por lo que las autoridades federales se comprometieron a dejarlas cubiertas al cien por ciento.
Cué Monteagudo estuvo enterado del desvió de recursos, desde mayo del 2015, por lo que con él, se acordó que se iba a subsanar, por ello se hizo un depósito de 80 millones de pesos, pero continuó el desvío.
La dependencia federal también aclaró que los depósitos de pago se hicieron puntualmente al Gobierno del Estado, pero alguien los desvió, que es lo que se tiene que investigar, si fue la Secretaria de Finanzas o en la Secretaría de Salud, pero la explicación que se dio es que los recursos se usaron para pagar la nómina de trabajadores regularizados, por lo que se desviaron.
Las negociaciones que terminaron con el paro de los trabajadores de la Secretaría de Salud, se efectuaron en la Ciudad de México, con las autoridades federales, representada por Graciela Romero Monroy, directora de Recursos Humanos, así como el encargado de la Secretaría de Salud, Héctor González, en la que estuvieron los dirigentes sindicales presididos por Mario Félix Pacheco, secretario de la Sección 35 del SNTSS.
En la reunión también se señaló que el presupuesto para la compra de medicinas había sido entregado al Seguro Popular de Oaxaca, que preside Rogelio Hernández Cázares, pero que hasta el momento se desconoce por qué éste no ha entregado los medicamentos.
La inconformidad y las protestas de la Sección 35 del SSTE, provocaron una fuerte envestida mediática, emprendida por la Coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado, que preside Miguel Ángel Muñoz, donde hubo filtraciones, de supuestos negocios realizados por dirigentes sindicales con los uniformes, hasta fotografías de reuniones entre dirigentes de las Secciones 22 del SNTE y la Sección 35, del Istmo de Tehuantepec.
Lo lamentable de lo que ocurre en el sector de salud, es la pérdida de vidas humanas de personas que no recibieron atención médica oportuna, ni medicamento o en condiciones adecuadas, porque esas vidas nadie las va a recuperar.
@MiguelAschulz
