Miguel Ángel Schultz
El asesinato de Mayra Luis Martínez, dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), perpetrado el día de ayer por la tarde en el municipio de San Francisco Tutla, es parte de la ingobernabilidad que aún persiste en Oaxaca, a pesar del inicio del nuevo gobierno que encabeza Alejandro Murat Hinojosa, lo que prueba que estamos en un proceso de descomposición social que continuará independientemente de quién gobierne.
Sin embargo, es necesario resaltar que la CROC es una agrupación adherida al Partido Revolucionario Institucional (PRI), que hoy tiene el poder el Oaxaca, sin que pueda contener la vorágine de violencia en la que han estado envueltos los transportistas, que se han venido enfrentando como lo que son, verdaderas mafias, que se diputan sus territorios con una pasión extrema.
Los seguidores de la lideresa sacrificada, entre estos su hermano Paulino Guadalupe Luis Martínez, han responsabilizado a integrantes del Sindicato Libertad, de ser los autores intelectuales del asesinato, ya que entre estos agrupamientos liderados por miembros de una misma familia, Luis Villaseca y que pertenecen al mismo partido el PRI, desde que se dividieron, los choques armados han sido constantes.
Aunque en este caso el dirigente del Sindicato Libertad, Iván Luis Villaseca, se ha deslindado de inmediato.
Estos hechos ponen de manifiesto que la recomposición de las fuerzas internas del PRI, entre sus organizaciones más beligerantes le estallan en la manos al recién ungido gobernador, quien está obligado a meter orden de inmediato en su propio partido, que durante el sexenio pasado, al no tener en sus manos el gobierno, a través de los métodos de la violencia física fue como arreglaron sus diferencias.
Tan sólo a inicios del mes de julio pasado, los integrantes de estos sindicatos priistas se enfrentaron a balazos en el municipio de Santa Lucía del Camino, confrontación que se extendió hasta la municipalidad de San Francisco Tutla, donde tienen su local los transportistas ahora agremiados a la CROC y que anteriormente pertenecían al Confederación Nacional de la Productividad (CNP) y en la que también participaron los miembros de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y el Sindicato Libertad.
El motivo del zafarrancho fue la disputa de los trabajos del Centro de Convenciones que se construye en Santa Lucía del Camino y que en un inicio se empezó a edificar en el Cerro de El Fortín, por la voluntad autoritaria del entonces gobernador, Gabino Cué Monteagudo, emanado de la coalición Unidos por la Paz y el Progreso, conformada por el PAN-PRD-Convergencia, partidos que hay que mencionar, para no olvidar el papel que han jugado.
Esta situación de violencia política extrema, nos hace ver lo que habría pasado si el PRI hubiera mantenido a sus agrupamientos posesionados del Palacio Legislativo, para inhibir las protestas de la Sección 22 del SNTE y permitir que Alejandro Murat tomara protesta en la Cámara de Diputados, por lo que con todo, el que lo hubiera hecho a la una y media de la madrugada en las instalaciones de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión, fue acertada.
Sin embargo, corresponde a la sociedad no solo aprobar esa toma de protesta en las penumbras de la noche, sino demandar que no se vuelva el método que use la actual administración como estilo de gobierno, ya que ayer no permitieron la presencia de los representantes de los medios de información en la reunión que sostuvieron los empresarios con los secretarios de turismo y economía, que fue presida por el ejecutivo.
No fue lo deseable, porque dentro de los empresarios que se reunieron a puerta cerrada, en varias ocasiones pidieron que se abrieran las puertas en las negociaciones con los integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pero ahora esos mismos empresarios piden, que las reuniones con ellos sean en lo oscurito y lo mismo que los funcionarios hoy ante empresarios, exigían que la sociedad estuviera enterada.
Ello es importante, porque en la medida que se transparente la actuación gubernamental y de la sociedad, se irán creando las condiciones para que la violencia, que ayer cobró la vida de una lideresa y otra mujer, dejen de existir métodos violentos para limar las diferencias y sobre todo porque mañana miércoles habrá una reunión con la Sección 22 del SNTE y es importante que las negociaciones sean de cara a la sociedad. Lo último que podemos decir es que por las dos mujeres asesinadas, es que se esclarezcan esos crímenes y que descansen en paz.
@MiguelAschulz
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