* Propone senadora Dolores Padierna pedir al gobierno federal que fije precio máximo para el huevo
* Desde finales de noviembre del año pasado el precio del huevo se incrementó 41.1 por ciento
* La Profeco deberá vigilar el cumplimiento de las disposiciones en materia de precios y tarifas
México, DF., 05-abr-2015.- Ante el considerable incremento en el precio del huevo, senadores del Partido Revolucionario Institucional proponen hacer un llamado a la Secretaría de Economía (SE) y a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que, en función de sus atribuciones, lleven a cabo las acciones necesarias a fin de evitar la especulación y que, en su caso, las prácticas comerciales ilegales sean castigadas conforme a la ley.
Lo anterior, debido a que tan sólo entre el 16 y el 20 de marzo pasados el paquete de 18 piezas de huevo blanco se vendió entre los 40.55 y 41.30 pesos en los supermercados del Distrito Federal, mientras que el precio en la Central de Abasto de Iztapalapa fue de 33.50 pesos el kilogramo.
En el punto de acuerdo presentado por los senadores, se precisa que de acuerdo con cifras de la Profeco, desde noviembre del año pasado el precio del huevo aumentó de 28 a 39.5 pesos, un incremento del 41.1 por ciento.
El documento señala, por otra parte, que en 2014 la industria avícola generó un millón 154 mil empleos, de los cuales 192 mil fueron directos y 962 mil indirectos.
El huevo ha sido durante muchos años parte de la dieta de las familias mexicanas, es consumido prácticamente en todos los niveles socioeconómicos; desafortunadamente se ha enfrentado a una serie de circunstancias externas que han alterado sus niveles de producción y su precio.
La Unión Nacional de Avicultores (UNA) ha planteado que si se realizan las inversiones necesarias en infraestructura de producción, procesos de valor agregado, investigación y mercadeo, la industria podría crecer a una tasa de seis por ciento anual durante los próximos 12 años.
Es por ello que los legisladores consideran que es urgente la intervención de la Secretaría de Economía y la Profeco, a fin de que fortalezcan las acciones de vigilancia, supervisión y aplicación de sanciones.
La Secretaría de Economía deberá establecer la política de precios y, con el auxilio y participación de las autoridades locales, vigilar su estricto cumplimiento, particularmente en lo que se refiere a artículos de consumo y uso popular.
Por su parte, la Procuraduría Federal del Consumidor deberá vigilar y verificar el cumplimiento de las disposiciones en materia de precios y tarifas establecidos o registrados por la autoridad competente, y coordinarse con otras autoridades legalmente facultadas para inspeccionar precios.
* Propone senadora Dolores Padierna pedir al gobierno federal que fije precio máximo para el huevo
Un trabajador promedio debería tener ingresos equivalentes a tres salarios mínimos para adquirir la canasta básica para él y sus dependientes; sin embargo, en el cuarto trimestre de 2012, el 66.4 por ciento de la población ocupada tenía ingresos menores a esa cantidad y, en el cuarto trimestre de 2014, la proporción aumentó a 67.2 por ciento, lo que refleja los niveles de pobreza que existen en el país, advirtió la senadora Dolores Padierna Luna.
La legisladora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) dijo que el gobierno tiene la obligación de implementar un control de los precios de la canasta básica y combatir prácticas especulativas que provocan el encarecimiento de ciertos productos, como ocurrió recientemente con el costo de la carne de res y el huevo.
Por ello propuso un punto de acuerdo para exhortar al Ejecutivo Federal para que, a través de la Secretaría de Economía, imponga un precio máximo y accesible de los productos de la canasta básica alimentaria, y especialmente a los dos antes mencionados.
La propuesta incluye solicitar que, en un plazo no mayor a 30 días naturales, el Ejecutivo envíe al Senado de la República un plan detallado para realizar modificaciones a las políticas económica, alimentaria, de empleo y de fomento al consumo interno, con el fin de revertir el incremento de la canasta básica y el deterioro de los salarios.
Asimismo, exige a la Comisión Federal de Competencia Económica realizar una investigación sobre las circunstancias que han provocado el aumento constante de los precios de los alimentos, y en especial en torno a las prácticas especulativas.
El documento señala que mientras el gobierno federal toma las medidas necesarias, se debe implementar un efectivo control de precios de los productos de la canasta básica que permitan mantener su crecimiento, por ejemplo, manteniéndolo un punto porcentual menor al de los salarios.
La senadora del Grupo Parlamentario del PRD precisó que, en febrero de este año, el costo de la canasta básica, alimentaria y no alimentaria, fue de dos mil 610 pesos mensuales por persona; en cambio, el salario mínimo mensual es de dos mil 078 pesos.
Aunado a ello, entre el cuarto trimestre de 2012 y el cuarto trimestre de 2014, el ingreso ha perdido 9.1 por ciento de su poder adquisitivo.
Padierna Luna refirió que la situación del empleo es crítica: no se crean los necesarios y los salarios en general se han deteriorado.
Puntualizó que esta situación en los ingresos de la población obliga al gobierno a rediseñar el modelo de desarrollo, porque por más de 20 años sólo ha beneficiado a pocos, en detrimento de la mayoría de la población mexicana.
Los puntos de acuerdo del PRI y de Padierna Luna se turnaron a la Comisión de Comercio y Fomento Industrial.