Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
La recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitida ayer acaba de cambiar, tal vez el destino de Oaxaca, al señalar el uso excesivo de la fuerza, por la masacre cometida por las fuerzas federales y personas sin uniformes en Apatzingán, Michoacán, el pasado 6 de enero, donde murieron nueve civiles. En estos hechos se vio involucrada la entonces subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), Mariana Benítez Tiburcio, no porque haya disparado un arma, sino porque cuando compareció ante la Primera Comisión de la Permanente, mintió y con ello sí cambio su destino político.
La hoy aspirante a la candidatura del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la gubernatura Oaxaca dijo, ante legisladores, que Alfredo Becerril fue destituido por Jesús Murillo Karam como delegado de la PGR en Michoacán, cuando en realidad renunció y como consecuencia de ello fue nombrado, en esa misma entidad, fiscal para los delitos de alto impacto. Con esta mentira probó su lealtad Alfredo Castillo, comisionado de seguridad en Michoacán, en ese momento, investigado por los mismos hechos y a Murillo Karam, titular de la PGR, con quienes tenía amistad y trató que le sirvieron para encumbrarse desde su formación, hasta llegar a recibir un homenaje por parte del Cabildo del municipio de Oaxaca y de manos de Javier Villacaña por su gran trayectoria, y por ser nacida y creada en este solar, como dice la canción.
Benítez Tiburcio también fue artífice de la “verdad histórica” del ex procurador Murillo Karam, sobre el caso de Ayotzinapa –la desaparición forzada de los 43 normalistas– que se ha caído a pedazos y que le costó el cargo y cuya investigación ahora ha tenido que ser reiniciada en manos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), integrado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Seguramente Mariana como experta en derecho sabe hasta dónde pueden llegar las consecuencias cuando una autoridad es omisa y actúa de mala fe.
@MiguelAschulz