* La producción del Inbal y la compañía Obra Negra Producciones se presentará del 22 de agosto al 14 de septiembre en el Teatro El Galeón Abraham Oceransky
Ciudad de México.- Un grupo de actores se sumerge en una farsa existencialista al improvisar una historia de amor. Pero cuando uno de ellos descubre que tiene cáncer, desata una serie de burlas sobre el sistema de salud y los costosos medicamentos. La enfermedad se convierte en metáfora de la fragilidad humana y la absurda naturaleza de la vida, mientras el humor ácido prevalece en toda la trama.
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través de la Coordinación Nacional de Teatro y la compañía Obra Negra Producciones, presentan la puesta en escena Un intruso: El seguro popular no cubre heridas de amor ni otros males, con dramaturgia y dirección de Iankarla Castillo Jiménez y las actuaciones de Yuly Moscosa, Óscar Gordillo, Cuauhtli Jiménez, Raúl Díaz y Alina Maldonado.
Su temporada se realizará del 22 de agosto al 14 de septiembre, con funciones jueves y viernes a las 20:00 horas, sábados a las 19:00 y domingos a las 18:00 horas, en el Teatro El Galeón Abraham Oceransky del Centro Cultural del Bosque.
Este texto dramático surge como resultado de dos pérdidas estadísticamente improbables: Dos actores atléticos de menos de 30 años, al sur de la República mexicana, mueren de cáncer en menos de dos años posteriores a un montaje en conjunto.
El eje principal de esta farsa es el intento de tres actores por contar una historia de amor que se fragmenta, como los personajes de la misma obra. Actores que toman la palabra para contar una anécdota de amor que termina en muerte, como las de Shakespeare, pero con la precariedad de los recursos económicos disponibles para un actor sin prestaciones.
“Este texto es parte de mi duelo, de mi amor y del amor a los apasionados locos que hicieron de la ficción su forma de vida y su vida dentro del arte no fue suficiente para pagar las medicinas”, compartió la dramaturga y directora, Iankarla Castillo.
“Durante toda la obra se juega con la metateatralidad en la que el protagonista se convierte en el personaje del personaje. Con ello, poco a poco, el actor integra un tono fársico y caricaturesco haciendo un recorrido desde su persona, pasando por el actor, el personaje y hasta llegar al ente no humano representado por glóbulos rojos, blancos y plaquetas”.
“Para diferenciar drásticamente a cada personaje exploré con ejercicios de resonancia a partir de la técnica Linklater y corporalmente con ejercicios de Lecoq”, continuó Castillo.
Por otro lado, en este montaje resulta esencial generar un diálogo entre los actores y la intérprete de música en vivo, por lo que el sonido se desarrollará como un personaje más con el que jugarán, la actriz y los actores, a manera de talkshow o como en una radiodifusora que tenga el timing perfecto para acentuar o burlarse de los conductores y, de esta manera, resaltar la crudeza del texto mezclando elementos de música ambient y noise para crear estados festivos y oscuros”, finalizó la directora de escena.
Los diseños de escenografía e iluminación son de Ricardo Salgado, el diseño sonoro es de Alina Maldonado, los diseños de vestuario, maquillaje y peinado son de Gabriel Ancira, la asesoría en manipulación de títere está a cargo de Amaranta Leyva, mientras que la producción ejecutiva es de Sandra Burgos.