En Oaxaca, la pobreza es la primera causa del trabajo de los niños en situación de calle, por lo que urge sumar esfuerzos para exigir políticas públicas, que no sean asistencialistas, con un sentido a mediano y largo plazo, señaló la directora del Centro de Apoyo al Niño de la Calle (CANICA), María del Carmen Espinoza Torres.

En entrevista para Oaxaca Entrelineas, dijo que ante esta situación es evidente la relación tan estrecha que existe entre la crisis económica y la falta de empleo, lo que provoca que cada día sean más niños los que tengan que salir a las calles a trabajar.

Luego de señalar que el 27.7 por ciento de los niños y niñas mexicanas viven en situación de pobreza, puntualizó que “el trabajo de menores de edad en la calle es un problema multifactorial, que desafortunadamente cada vez es más díficil disminuir en Oaxaca”.

Consideró que este problema es parte de un círculo económico el cual no se va a poder romper nunca, si el gobierno, la sociedad civil, el sector empresarial y comercial y las asociaciones civiles no conjuntan esfuerzos y hacen algo para buscar una solución a esta situación.

“Sin una visión existencialista, inmediata y cortoplacista la crisis laboral y de pobreza en la que viven los niños trabajadores de calle seguirá estancada”, apuntó.

En este sentido, dijo que en el Centro Histórico, los principales cruceros de la ciudad y la Central de Abastos son los lugares en donde se puede ver constantemente a niños trabajando.

Además, dijo que se tiene que tomar en cuenta que hay mayores etapas de recurrencia principalmente en las temporadas de turismo alto en donde llegan niños de comunidades alejadas o de otros estados como Chiapas, Guerrero y Puebla que trabajan en Oaxaca durante las vacaciones de verano, así como durante la Guelaguetza, Semana Santa o festividades de fin de año.

Desafortunadamente no basta con que el gobierno y la sociedad realicen acciones “paternalistas” y de mediana solución. “Solucionar la situación de pobreza en los infantes oaxaqueños y mexicanos ya no es cuestión de regalar becas, útiles escolares, uniformes, desayunos calientes ó un suéter”, sostuvo.

Por tal motive, manifestó que es urgente que “absolutamente todos”, gobierno, sociedad civil, sector empresarial, privado y comercial nos pongamos a trabajar en estrategias que de “fondo” atiendan de manera integral a los niños y niñas trabajadores, lo cual daría como consecuencia cierta disminución en los índices de pobreza.

En Oaxaca, existen niños trabajadores de la calle y aquellos que viven en situación de calle. Los primeros son aquellos que cuentan con un entorno familiar pero viven en situación de pobreza y los segundos son los que ni si quiera tienen un techo donde dormir.

“La principal característica de los niños trabajadores de calles es que viven en hogares mono parentales, es decir que les falta la presencia paterna, radican en los municipios conurbados en situación extrema de pobreza, con la faltante de los servicios básicos” expuso.

En cuanto a cifras, Espinoza Torres informó que ni por parte del gobierno, así como instancias académicas no existe un registro oficial de cuántos niños viven en cualquiera de éstas dos situaciones.

“CANICA en un ciclo que no sea temporada vacacional tiene contabilizados 250 niños trabajadores de calle”. afirmó.

Por otra parte reconoció que existe el fenómeno de la “explotación laboral” hacia niños, de padres, padrastros o abuelos, pero en su mayoría en Oaxaca es por cuestiones de pobreza, por eso no se puede generalizar.

“Recordemos que la primera causa del trabajo infantil es la pobreza, pero también se han detectado otras dos causas, como la desintegración familiar y la violencia intrafamiliar, causas que originan la explotación laboral en los menores de edad”, abundó.

Oaxaca en particular es el estado con mayor violencia intrafamiliar en México. Además, se ha encontrado que el 98 por ciento del maltrato infantil en México lo sufren las niñas. Dicho porcentaje ha aumentado en un 61.3 por ciento entre 2001 y 2003.

Diariamente se presentan entre 6 y 10 quejas de maltrato a niñas o niños. Sin embargo el problema es mucho más grave, ya que por cada caso reportado hay 4 que quedan en el anonimato, calculándose así que existen diariamente 40 casos de maltrato infantil.

Este tipo de denuncias ha ido en aumento en los últimos años. El 53% de los niños en situación de calle son niños y el 47 % son niñas. Esta cifra está ligeramente descompensada debido a que la explotación en las niñas está relacionada a labores y responsabilidades del propio hogar.

Para finalizar, Espinoza Torres recordó que se cuenta con una encuesta a nivel nacional que reveló que muchos de los delincuentes que se encuentran en las cárceles del país durante su infancia vivieron situaciones de trabajo en la calle, por lo que se podría señalar que los menores están expuestos a situaciones de violencia, robo ó incluso, la delincuencia organizada.