Lizette Mendoza Alavéz
El subsecretario de Gobierno, Joaquín Rodríguez Palacios, informó que tras la balacera ocurrida el lunes pasado en San Juan Copala donde tres mujeres triquis resultaron heridas, el Gobierno no puede esperar más ante tantas agresiones, por lo que “tendrá que poner orden en esa población con el último recurso pensado para solucionar este conflicto: la fuerza pública”.
En este sentido dio a conocer que ya se esta en pláticas junto con los jefes policiacos para analizar las posibles estrategias a fin de ingresar a esa comunidad de la región Mixteca y de esta forma acabar con las balaceras y lograr que “la vida se respete”.
Rodríguez Palacios explicó “no está confirmado si hay 500 hombres armados o no, así sean 10 o 15, la Policía Preventiva y la Agencia Estatal de Investigaciones, van ingresar a poner orden, porque el Estado no puede seguir como espectador viendo como se matan”.
“Vamos a regresar la tranquilidad a ese pueblo, vamos a lograr que sus ciudadanos vuelvan a contar con los servicios básicos de energía eléctrica, insumos, agua, vamos a lograr retornar la calma”, subrayó.
El funcionario enfatizó que “no vamos a esperar más, porque todos los días hay disparos, vamos a ingresar y acabar con ese estado de excepción”.
Referente a cuándo y cuántos elementos participarán en dicho despliegue policíaco, el funcionario público no quiso dar más detalles, argumentando que en tiempo y forma se darán a conocer.
Cabe resaltar que las triquis heridas por proyectil de arma de fuego son Rosa Marcial, de 35 años, lesionada en la pierna izquierda; María López, de 49 años, con dos impactos de proyectil de arma de fuego en el pie izquierdo y Macaria Martínez, de 80 años, con un balazo en el tobillo izquierdo.
Por otra parte, las más de veinte mujeres que trasladaron su plantón a un costado del ex Convento de Santo Domingo de Guzmán, con motivo de la celebración del Grito de Independencia, este viernes regresaron nuevamente al Museo del Palacio, luego de cumplir el acuerdo pactado con el secretario general de gobierno, Evencio Nicolás Martínez.
El acuerdo consistió en cambiarse de lugar sólo por tres días y así poder realizar las celebraciones del Grito de Independencia y el desfile cívico-militar por el Bicentenario de la Independencia de México.
Por su parte, Reina Martínez integrante del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI), dijo que ya estaba planeado que regresaran el día de viernes al Zócalo capitalino.
“Fue un acuerdo que tomamos con el secretario general de gobierno, que nos íbamos a retirar unos días por la fiesta que iban a celebrar ellos, y después regresábamos, porque el problema que está en nuestro pueblo sigue y está empeorando”, indicó.
