Por Felipe Barrera Jaramillo
Ciudad de México.- Integrantes del movimiento “Yo Soy 132” derribaron vallas y se enfrentaron a granaderos y policías federales que custodiaban el Palacio Legislativo de San Lázaro. Ante el lanzamiento de bombas molotov, piedras y petardos, las fuerzas federales respondieron con balas de goma y gases lacrimógenos.
En un principio se afirmó que el estudiante Carlos Yahir Valdivia, de 25 años de edad, oriundo de Zimatlán de Álvarez, Oaxaca, murió al recibir un impacto bala de goma en la cabeza, pero después se corroboró que no murió, pero está herido de gravedad.
Además, en el zafarrancho resultaron otros 23 heridos, entre policías y manifestantes; las fuerzas federales reforzaron la seguridad con tanquetas antimotines que lanzaron chorros de agua para dispersar a los rijosos.
Mientras, al interior de la Cámara de Diputados, y ante el amague de opositores de izquierda, legisladores del PRI se apostaron en la escalinata que conduce al podio camaral para impedir que tomaran la tribuna. El priista por Oaxaca, Samuel Gurrión Matías, conformó esa valla de custodia y recibió consignas de los perredistas oaxaqueños Gloria Bautista Cuevas y Hugo Jarquín.
Después, diputados del PRD, PT y Movimiento Ciudadano mostraron pancartas con impresiones de tarjetas Monex y Soriana, para reiterar que “Peña Nieto compró la Presidencia” y lanzaron al aire papelitos con la impresión de billetes de diversas nominaciones cuando el Presidente de la República se perfilaba a rendir protesta constitucional.
Otras pancartas repudiaban a Felipe Calderón por los más de 70 mil muertos en la guerra contra el narcotráfico, incluso cuando entró al Salón de Plenos le lanzaron gritos de “asesino, asesino” y “borracho, borracho”, el aludido simplemente endureció el rostro.
En entrevista, el diputado federal del PAN por Oaxaca, Víctor González Manríquez, lamentó los hechos violentos fuera de la Cámara de Diputadfos y reprobó el comportamiento incivilizado de algunos miembros de la izquierda y afirmo que su partido será una oposición responsable y apoyarán al nuevo gobierno, aunque advirtió que la bancada panista no dará cheques en blanco, sino que votarán a favor de todas aquellas iniciativas que Peña Nieto envíe al Congreso, siempre y cuando traigan beneficios directos a la ciudadanía.
Así, en menos de 15 minutos, Calderón se despojó la banda presidencial, la besó y la puso en manos del Diputados Jesús Murillo Karam, quien en su calidad de Presidente de la Mesa Directiva la entregó a Peña Nieto para que se la colocará y rendir protesta como Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
Posteriormente, Peña Nieto se trasladó a Palacio Nacional, donde tomo la protesta a su gabineteeconómico y dio un mensaje a la nación.