* Abatir la impunidad de estos crímenes es el principal antídoto para evitar su repetición
* Para que la libertad de expresión sea plena y libre, se requiere ejercer en condiciones de seguridad
Ciudad de México.- 148 periodistas han sido asesinados desde el año 2000 -siete de ellos victimados en los primeros meses de 2019- y 21 se encuentran desaparecidos desde el 2005, informó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en el marco del Día de la Libertad de Expresión -7 de junio-.
El presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, agregó que de esta manera México se coloca como el país latinoamericano con el mayor número de homicidios en este rubro, lo que sustenta y justifica que se considere el ejercicio de la actividad periodística como de alto riesgo.
Lo anterior, sin que las autoridades responsables acierten a implementar políticas públicas que permitan vislumbrar que la violencia contra el gremio pueda tener un próximo fin. Las entidades federativas con mayor número de homicidios de periodistas son Veracruz (22 casos), Tamaulipas (16), Guerrero (16), Oaxaca (16) y Chihuahua (14).
Conforme al último análisis realizado por la CNDH a las indagatorias relacionadas con homicidios de comunicadores, se determinó que en cerca del 90 por ciento de los casos existe impunidad, cifra que se eleva a 100 por ciento en los 21 casos de comunicadores desaparecidos y de los 52 atentados a instalaciones de medios de comunicación registrados desde el 2005 y 2006, respectivamente.
Aun cuando algunos expedientes hayan superado los plazos lógicos para una investigación, el derecho a la justicia y a la verdad de las víctimas debe hacerse efectivo, agregó.
En este contexto, la CNDH dio a conocer la campaña “Con violencia no hay libertad de expresión”, que incluye materiales para televisión, radio, medios impresos y redes sociales, que busca llamar la atención sobre la importancia que este derecho tiene para la democracia, las agresiones diferenciadas que sufren las mujeres periodistas y la necesidad de que las autoridades de procuración de justicia investiguen diligentemente cualquier tipo de crímenes en su contra.
La campaña se ha presentada en la Ciudad de México, Tijuana, Veracruz, Zacatecas, Saltillo, Reynosa y, el día de ayer, en coordinación con la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez.
La difusión de estos materiales, junto con la tramitación de quejas y emisión de recomendaciones generales y específicas sobre casos de violaciones a los derechos humanos de quienes integran este gremio, así como la capacitación permanente, constituyen parte del esfuerzo de la CNDH en pro de periodistas, medios de comunicación y, en general, de la libertad de expresión en México.
El pasado 30 de abril, Michelle Bachelet, Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, dirigió una carta al secretario de Relaciones Exteriores que contiene diversas propuestas sobre las temáticas que en materia de derechos humanos resultan más urgentes de atender en el país, a fin de contar con un plan de acción integral en las mismas.
Con relación a quienes ejercen el periodismo, destacó la necesidad de protegerlos contra la violencia de cualquier tipo, especialmente a las mujeres periodistas, y demostrar mayor compromiso con quienes integran este gremio para asegurar que puedan desarrollar su labor libre de intimidación, hostigamiento y ataques, así como una mayor mejora del Mecanismo de Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. La prevención de las agresiones contra comunicadores, la investigación de los delitos cometidos en su contra y la sanción contra quienes cometen esos crímenes, constituyen tres eslabones clave para reducir la violencia contra periodistas y medios, tarea en la que los tres órdenes de gobierno del país deben poner especial atención. La democracia depende, en gran medida, de que la libertad de expresión se ejerza de manera libre y en condiciones de seguridad.