El candidato considerado de ultra derecha José Antonio Kast reconoció su derrota a través de su cuenta de Twitter en la que posteo el mensaje:
Acabo de hablar con @gabrielboric y lo he felicitado por su gran triunfo. Desde hoy es el Presidente electo de Chile y merece todo nuestro respeto y colaboración constructiva. Chile siempre está primero.
Hasta el momento, cerca de las 21 horas de Chile, el recuentos de votos daba un resultado con el 99,72 por ciento escrutado; Boric gana con el 55,86 por ciento de los votos, en tanto el derechista José Antonio Kast obtenía el 44,14% por lo que el triunfo era irreversible.
El electorado superó el 50% y es la primera elección presidencial en la historia del país en la que participa más de la mitad del padrón electoral.
El mandatario electo chileno Gabriel Boric, es el más joven de la historia de este país, de apenas 35 años de edad, en su primer discurso también lo inició con una frase en idioma mapuche, pueblo originario de Chile para luego agradecer a todos su participación.
Asimismo destacó que: “Chile no puede volver a tener un presidente que le declare la guerra a su propio pueblo”.
En estos comicios estuvieron ausente los partidos tradicionales chilenos de centro-izquierda y centro-derecha.
Gabriel Boric abanderó la coalición: “Apruebo Dignidad (Frente Amplio y Partido Comunista), empezó su participación política como parte de los líderes estudiantiles que hace una década organizaron las protestas en demanda de educación gratuita, libre y de calidad.
En tanto el candidato de la ultraderecha José Antonio Kast fue candidato del Frente Social Cristiano y ha sido seguidor y defensor de la política de Augusto Pinochet. Sus padres alemanes emigraron a Chile en 1950.
El presidente electo de Chile agradeció a los movimientos feministas que le brindaron sus respaldo y su lucha por decidir sobre su propio cuerpo, al tiempo que saludó a los disidentes sexuales a quienes aseguró, serán protagonista de su gobierno, en el que no habrá discriminación.
Aseguró que pugnará por una nueva relación con los pueblos originarios chilenos.
Que el respeto a los derechos humanos es para su gobierno un principio inclaudicable, que no se cansará de buscar para quienes violaron sus derechos humanos de todos los tiempos, verdad, justicia, reparación y no repetición de la violación a los derechos humanos.
Señaló que crecimiento y distribución justa de la riqueza van de la mano, por lo que habrá equidad social, igualando hacia arriba.
Asimismo reconoció las precarias condiciones en las que se encuentra Chile y que tendrá que afrontar su gobierno, por lo que expresó: “los tiempos que vienen no van a ser fáciles. Debemos hacer frentes a las consecuencias sociales económicas y sanitarias de la peor pandemia” en la historia y “los motivos de un estallido social que siguen vigentes.
En cuanto a la violencia que sufrieron las protestas sociales en Chile, a manos de los policías y fuerzas de seguridad garantizó que no habrá impunidad.
Gabriel Boric, quien apoyó desde el inicio la asamblea constituyente chilena, pronunció varias de las consignas presentes durante aquellas protestas, iniciadas en el 2019: “Que los derechos sean derechos, y no bienes de consumo, no negocio”, indicó.
Se comprometió a conservar el medio ambiente remarcando un no a la “Dominga”, proyecto minero de la norteña Región de Coquimbo, que tiene grave impacto ambiental.
Asimismo dijo que: “con nosotros a la Moneda (palacio nacional de Chile), entra la gente”.
Gabriel Boric puntualizó que será un presidente “que cuide la democracia, no que la exponga, que escuche más de lo que habla” y prometió una política “que combata los privilegios de unos pocos”.
En Chile el 11 de septiembre de 1973 fue derrocado el gobierno de la Unidad Popular 1970-1973, del presidente Salvador Allende, que murió ese día en el Palacio de la Moneda; fue el primer presidente marxista en el mundo que llegó al gobierno a través de las urnas. El golpe de estado llevó al poder a una junta militar que presidió el general Augusto Pinochet Ugarte, que lo mantuvo hasta 1990.
