Entrelíneas
Miguel Ángel Schultz
La tormenta sigue subiendo de intensidad en la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional (PAN) de Oaxaca, en la que como en los viejos tiempos del panismo local de la década de los 80s del siglo pasado, preferían perder todo que llegar a acuerdos internos, por lo que el conflicto será resuelto por su dirección nacional el próximo lunes, ante el desconocimiento de Natividad Díaz Jiménez como coordinadora de la fracción parlamentaria del blanquiazul en la Sexagésima Segunda Legislatura del Estado.
La remoción de Díaz Jiménez también generó su sustitución de la presidencia de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) de la Cámara de Diputados y en su lugar nombraron a Gerardo García Henestroza, quien fue reconocido de inmediato por los representantes de las fracciones parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Avilés y del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús López Rodríguez.
El conflicto tiene su origen en dos ingredientes, el económico y el político, ya que ha habido una gran inconformidad en la Cámara de Diputados local, por el manejo del enorme presupuesto y que este año alcanza los 676 millones 300 mil pesos, incluyendo los designados a la Auditoria Superior del Estado de Oaxaca.
Se asegura que son los coordinadores de las fracciones parlamentarias, quienes parten el queso con la lana, sin que enteren a sus representados dónde quedan los más de 605 millones de pesos de Legislatura local.
De acuerdo a un estudio difundo por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), de los 32 congresos locales de México, el de Oaxaca, representa el más caro del país. Por otra parte trascendió que cada diputado recibe anualmente 10 millones de pesos, según lo ha declarado con anterioridad el propio tesorero de la Cámara de Diputados, Mauro Alberto Sánchez Hernández.
Sin embargo, esto es negado por todos los legisladores sin excepción, por lo que es un misterio en qué se gasta el dinero del Congreso, cuyas instalaciones están en malas condiciones, tan precarias que ahora en lugar de restaurante, que funcionaba en el recinto parlamentario, hay un puesto de fritangas callejero dentro del patio legislativo, donde se pueden consumir los alimentos, claro previo pago.
El otro elemento de la fractura de los diputados del PAN, es el político, por la contienda electoral a la Presidencia de la República, que si bien se llevará a cabo en el año 2018, ésta ya inició, lo que ha originado una guerra intestina en el blanquiazul ante la existencia de tres precandidatos presidenciales: Margarita Zavala, esposa del ex presidente Felipe Calderón; el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle y de última hora Ricardo Anaya Cortés.
A Juan Mendoza Reyes y a Díaz Jiménez los identifican con Anaya Cortés, por lo que buscan a toda costa reventarlos, para que no puedan mantener el control de la próxima dirección estatal del PAN, por lo que se dice, los diputados conjurados son apoyados por Diódoro Carrasco Altamirano, ex gobernador de Oaxaca y secretario General del Gobierno de Puebla.
Sin embargo, el propio Moreno Valle, quien se desempeña como coordinador de la Comisión Política del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, representaría un apoyo aún más fuerte para las y los diputados panistas, que a través de un boletín de prensa enviado ayer por la tarde, pareciera mostrar el pacto de sangre que existe entre los subversivos panistas, Alejandra Morlán (sic), Leslie Jiménez, Zonia López, Luis Enrique Ortega, Sergio Bello, Alejandro Martínez, Víctor Cruz y García Henestroza.
El escrito dice en sus primeras líneas: “diputados integrantes de la fracción parlamentaria del PAN en la LXII Legislatura local confirmaron que el nombramiento de Gerardo García Henestroza, como coordinador de la bancada, se mantiene firme, y que en el procedimiento se cubrieron todos los requisitos legales”.
“Las y los legisladores panistas recordaron que la sustitución en la coordinación de la bancada, y por ende, en la presidencia de la JUCOPO, se realizó con profundo apego a la Ley Orgánica del Poder Legislativo, y no tiene que ver con caprichos o imposiciones partidistas”.
Lo anterior porque Mendoza Reyes, notificó al Congreso que el nombramiento de García Henestroza, era ilegal de acuerdo a los estatutos del PAN y que la coordinadora seguía siendo Díaz Jiménez.
Sin embargo, toda esta pugna intestina panista, es parte de la ingobernabilidad que existe en Oaxaca, producto de una administración en descomposición, porque el propio Mendoza Reyes ha denunciado la intromisión del gobernador Gabino Cué Monteagudo, quien llamó a los conjurados a reventar a Díaz Jiménez, según también lo filtró, el diputado Luis Enrique Ortega, suplente de Javier Barroso, que había sido petición del gobernador para liberar temas del Congreso.
Que lamentable que hasta en esto se vea envuelto el propio mandatario, que ante la gravedad del señalamiento debería dar una explicación pública. Que lamentable también que sean los propios panistas que hayan votado para que le quitaran a su propio partido la posibilidad de tener fracción parlamentaria al subir el número de dos a cinco los diputados que conformen una fracción.
Pero más lamentable que diputadas apuñalen a otra mujer, cuando se habían caracterizado por defender las causas de género y terminaron Alejandra García Morlán, Leslie Jiménez, Zonia López, apoyando a un hombre, cumpliendo al pie de la letra el dicho aquel que “mujeres juntas ni difuntas”.
@MiguelAschulz
