El gran negocio del transporte público

Entrelineas

Oaxaca camiones  2

Miguel Ángel Schultz

El reciente incremento en el precio del pasaje del transporte público, de seis a siete pesos en la ciudad de Oaxaca, provocó de inmediato un aumento en todo el estado, lo que rebasó a la Secretaría de Vialidad y Transporte (SEVITRA), que preside Carlos Moreno Alcántara, quien ha sido incapaz de aplicar la Ley de Transporte del Estado de Oaxaca, en vigor desde marzo del año pasado, cuyos objetivos es que el gobierno tenga en sus manos la planeación, regulación, administración, control y supervisión de la prestación del servicio público de transporte, lo que de ninguna manera es una realidad, por lo que es una ley que nació muerta.

Los choferes del transporte trabajan en condiciones infrahumanas atenidos a las comisiones que logran durante el día, porque los dueños de las concesiones y los camiones le fijan lo que le llaman “cuenta”, que es la cuota que le piden todos los días que van de los mil 500 a los dos mil 200 pesos, dependiendo de la ruta y del estado físico en que se encuentre el camión.

Los transportistas ni siquiera respetan los más elementales derechos de los trabajadores del volante, trabajan hasta más de 12 horas diarias, como tampoco existen para Daniel Juárez López, titular de la Secretaria del Trabajo (SETRAO), quien anda metido en cosas que nada tienen que ver con su principal objetivo, por ejemplo el domingo organizó un maratón de 10 kilómetros en la ciudad de Oaxaca, para según él “vigilar el respeto a los derechos laborales”, por lo que llevó a cabo la Primera Carrera Atlética “Mujer, Madre y Trabajadora”. En vez de inspeccionar cumplan la ley laboral los transportistas.

Es necesario aclarar que el chofer tiene que pagar la reparación de ponchaduras de llantas y los aceites, demás dejar el camión con el tanque lleno de combustible y cubrir accidentes. También, los taxistas tienen su “cuenta”, que va de los 300 a los 400 pesos; si es colectivo igual hay una cuanta, lo mismo para los mototaxista que va de 150 a 200 pesitos. Quién gana siempre será el dueño del vehículo y concesión. Si hay un propietario de dos camiones se lleva tres mil pesos diarios o sea que al mes 78 mil pesos, trabajando el chofer 26 días. Ahí saque usted su propia cuenta.

Esto explica porque los choferes se transforman en verdaderos energúmenos que se pelean por el peso, buscan llenar el camión, se muestran iracundos cuando un estudiante o un anciano con credencial del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores pagan la mitad del pasaje.

El poder que tienen los transportistas depende del partido y grupo en el poder que les dio las concesiones. En época electoral se vuelven acarreadores de votantes para ganar elecciones, Del  uso que dan de la infraestructura urbana y los favores de los que gozan, hablaremos después.

@MiguelAschulz

Miguel Ángel

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Wordpress Social Share Plugin powered by Ultimatelysocial