* Invita secretaria de Desarrollo Social a legisladores a integrarse en esta gran contraloría social
* Explicó a los miembros de las comisiones de Desarrollo Social y de Asuntos Indígenas la integración de la estrategia de combate a la pobreza extrema y al hambre
México, DF.- La Cruzada Nacional Contra el Hambre garantiza su transparencia porque será evaluada por la sociedad y, especialmente, por las propias comunidades beneficiarias, afirmó la titular de la Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), Rosario Robles Berlanga, al invitar a los diputados integrantes de las Comisiones Unidas de Desarrollo Social y de Asuntos Indígenas a sumarse a esa gran contraloría social.
Durante su comparecencia ante las Comisiones Unidas de Desarrollo Social y de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados, invitó a los legisladores a integrarse a esta contraloría social para atestiguar el trabajo de atención a la población que realmente lo necesita en los 400 municipios contemplados por la Cruzada, en su primera etapa.
Robles Berlanga explicó a los diputados que México vive un cambio estructural en el combate a la pobreza extrema, con una estrategia integral de inclusión y bienestar social de respeto pleno al desarrollo de las capacidades de las personas para mejorar sus condiciones individuales y colectivas.
Las acciones de la Cruzada Nacional Contra el Hambre obedecen a una política social de nueva generación instrumentada por el presidente Enrique Peña Nieto a través del eje rector México Incluyente, para garantizar el ejercicio de los derechos sociales consagrados en la Carta Magna, como son los correspondientes a la alimentación, salud, educación, vivienda, seguridad social y a los servicios de infraestructura básica, así como fortalecer las capacidades productivas para el mejoramiento de los ingresos y las condiciones de vida de los mexicanos en situación de pobreza, apuntó.
Robles Berlanga reiteró los cinco grandes objetivos de la Cruzada Nacional Contra el Hambre:
Garantizar una alimentación adecuada a la población en pobreza extrema y carencia alimentaria; Disminuir la desnutrición infantil aguda y mejorar los indicadores de peso y talla de la población; e incrementar la producción alimentaria, a través de reorientar la política hacia el campo, hacia los pequeños productores.
Asimismo, disminuir los desperdicios de alimentos, tanto a nivel poscosecha como en los de transporte y comercialización e impulsar la movilización social, la participación ciudadana.
Luego de reconocer que el problema de la pobreza tiene dos criterios: rural y urbano, por lo que la Cruzada construye a partir de ellos un mapa de intervención, enfatizó que de acuerdo con la recomendación del Coneval, es urgente atender la pobreza urbana porque tiene mayor peso en volumen poblacional, además de generar desigualdades y fracturar el tejido social, por lo que resulta más lacerante.
Explicó que con esta estrategia se impulsará la participación social para romper con los individualismos. “No más una relación individual del gobierno con los ciudadanos, sino construir la participación social, para que sean los propios ciudadanos quienes determinen las prioridades en sus comunidades, verifiquen que se está cumpliendo y evalúen los avances de la Cruzada”.
Respecto al seguimiento y evaluación de las acciones, asentó que “queremos integrar auténticas contralorías sociales, y qué bueno que el Congreso nos quiera seguir en la Cruzada, pero aún mejor que quienes nos sigan, que quienes nos evalúen, sean quienes reciben estos beneficios, muchos de ellos indígenas, porque más de la mitad de la población de los municipios considerados son de origen indígena”.
Se refirió también a la firma de los Acuerdos Integrales para el Desarrollo Social Incluyente, para que todas nuestras acciones sean de común acuerdo con los gobiernos estatales y municipales. “Nada por encima de ellos, nada al margen de los gobiernos estatales y municipales”.
Robles Berlanga explicó los criterios para seleccionar a los 400 municipios que integran la primera etapa de la Cruzada, en los que se privilegiaron los indicadores del Coneval acerca de la población en pobreza extrema y carencia alimentaria.
“No hay magia: con el cruce de estos indicadores obtuvimos los municipios a atender prioritariamente; es donde están los más pobres entre los pobres y es a donde tenemos que ir como un acto de justicia social”.
Durante la comparecencia, acompañaron a la secretaria de Estado los presidentes de las comisiones de Asuntos Indígenas, Eufrosina Cruz Mendoza; de Desarrollo Social, Fernando Charleston Hernández; el coordinador de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática, Silvano Aureoles; el coordinador Parlamentario y Legislativo de la Cámara de Diputados, Manuel Añorve Baños, y la titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, Nuvia Mayorga.
Asimismo, estuvieron los subsecretarios de Desarrollo Social y Humano, Ernesto Javier Nemer Álvarez; de Prospectiva, Planeación y Evaluación, Juan Carlos Lastiri Quirós, y de Desarrollo Urbano y Ordenación del Territorio, Javier Guerrero García.