San Raymundo Jalpan, Oax.- La transición democrática en Oaxaca requiere de un nuevo formato en la presentación del informe de gobierno, sostuvo el diputado del PT, Flavio Sosa Villavicencio, al presentar una iniciativa suscrita también por sus homólogos Luis de Guadalupe Martínez Ramírez y Marlene Aldeco Reyes Retana, del PAN, así como Pavel Renato López Gómez, del PT.

La iniciativa con proyecto de decreto propone que el Gobernador del Estado se presente al recinto legislativo y entregue al presidente de la Mesa Directiva un informe por escrito sobre el estado que guarda la administración pública estatal, “el cual podrá leerlo y los diputados hacer las preguntas con el debido orden y respeto”.

“Con ello, se establecerá un diálogo respetuoso republicano entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, y la posibilidad de cuestionar al Gobernador del Estado”, subrayó el legislador del Partido del Trabajo (PT), durante la sesión ordinaria de la LXI Legislatura del Estado.

En tribuna, Sosa Villavicencio popular refirió que “anteriormente era la fiesta del gobernante en turno, hoy se ha convertido en una ceremonia acartonada en la cual si el gobernador lo decide envía un documento al Congreso del Estado, lo presenta, o hace uso de la palabra, por eso la transición requiere de un nuevo formato”.

La iniciativa propone reformar el segundo párrafo del Artículo 43 de la Constitución Política del Estado de Oaxaca; el artículo 10 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado, y el tercer párrafo del Artículo 8 del Reglamento Interior del Congreso estatal.

Sosa Villavicencio afirmó que en los tiempos que vive la entidad, la alternativa es fortalecer la función parlamentaria a partir de un Poder Legislativo fuerte, pero a la vez respetuoso de los demás poderes, pues sólo así se logrará una relación sana y equilibrada.

Consideró que la división de las facultades que caracteriza nuestro sistema demandan de la existencia real de un diálogo respetuoso entre poderes, el Ejecutivo con el Legislativo, ambos elegidos por las y los ciudadanos, si bien tradicionalmente ha existido una clara sumisión del Legislativo hacia el Ejecutivo y especialmente en el último sexenio.

Mencionó que como representantes populares es su obligación darse cuenta de que este tipo de relación obedece a otros tiempos, a una democracia simulada por un sistema autoritario y, por ello, hay que establecer las condiciones para que nunca más un ciudadano sea considerado como súbdito.

El legislador del PT recordó que el texto actual del Artículo 43 corresponde al régimen de gobierno que estuvo hasta el año 2010, y el actual se ha declarado de alternancia y busca la transición hacia un Estado más social y democrático.

“Si el anterior régimen impedía el diálogo franco y republicano entre los poderes Legislativo y Ejecutivo, sobre todo en el acto constitucional de rendición del informe sobre el estado que guarda la administración pública estatal, el actual debe permitir ese diálogo porque es la forma de comunicación institucional”, apuntó.

Dijo que no puede continuar un formato en el que el Gobernador solamente se presente a la entrega de un informe escrito con la opción, al arbitrio del titular del Poder Ejecutivo estatal, de leerlo o no, y tampoco se puede sostener el formato que obliga a callar a los representantes de la soberanía popular.

“Es cierto que los diputados deben conducirse con respeto y mediante un formato que logre un diálogo respetuoso y enriquecedor de las respuestas que la población espera ante sus múltiples preguntas que se hace en el rincón del silencio impuesto por el ordenamiento legal actual, pero no pueden ser simples testigos de un cumplimiento forzoso que la Constitución local le impone al Gobernador”, subrayó.

Sosa Villavicencio puntualizó que el Gobernador del Estado debe ser cuestionado y debe responder a todo cuestionamiento, y resaltó la interacción libre y respetuosa, sin la interrupción o descalificación del desempeño gubernamental.

Por su parte, López Gómez señaló que ha quedado desfasado el formato del informe anual sobre la situación que guarda el Estado y la administración pública, que por obligación constitucional lleva a cabo el titular del Poder Ejecutivo estatal el 15 de noviembre, en sesión solemne del Congreso del Estado.

Consideró que “ha llegado el momento de debatir si se quiere un diálogo, una discusión crítica entre poderes, o seguir bajo el esquema heredado del presidencialismo totalitario en donde los diputados no pueden realizar mociones, interrupciones ni interpelaciones en la sesión del informe”.

El diputado del PT afirmó que está claro que el diálogo sano entre poderes mejora la gobernabilidad y eficacia de las instituciones y, por esa razón, la propuesta de reforma para modificar el formato del informe contribuye a la consolidación de una verdadera institucionalidad.

“También lo convierte en un acto republicano más que en un monólogo dictatorial como ocurría cuando el Poder Legislativo figuraba como simple observador que aprobaba las decisiones del mandatario estatal”, indicó López Gómez.

La iniciativa fue turnada a las Comisiones Permanentes de Estudios Constitucionales, Administración de Justicia e Instructora.