A la memoria de Manuel Buendía, con motivo del XXVIII Aniversario de su asesinato.

A las autoridades federales y estatales

A la Opinión Pública Nacional y estatal

A los medios de comunicación y periodistas en general

Oaxaca.- Durante los últimos años, decenas de periodistas mexicanos han sido asesinados en diferentes partes del país, algunos de forma cruel y macabra; otros se han tenido que exiliar frente al clima de violencia, incertidumbre y terror que ha generado el crimen organizado, y otros más se han tenido que autocensurar para proteger su integridad física y salvar su vida.

A lo largo de estos años, como dirigentes y miembros del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa hemos denunciado ante el Gobierno federal y los Gobiernos Estatales, pero también ante organismos internacionales de periodistas y de derechos humanos, esta larga cadena de crímenes que tanto repudiamos, y exigido, como lo hacemos hoy nuevamente, el castigo para los responsables de los asesinatos de nuestros compañeros periodistas.

En el presente año, para ser más específicos, hemos denunciado el asesinato de la periodista Regina Martínez, corresponsal de proceso en Veracruz, y de tres periodistas más en esa entidad; el crimen de René Orta Salgado en Cuernavaca, Morelos, y más recientemente, otro cruel homicidio del compañero Marco Antonio Ávila García, ocurrido en Sonora, cuyo cuerpo presentaba, al igual que en otros casos, visibles huellas de tortura.

Durante todo ese tiempo, las personas que con membretes de la Asociación de Periodistas de Oaxaca, del Club de Periodistas de Antequera y de “CONACOPE” que hoy convocan a una marcha con motivo del 7 de junio, utilizando de mala fe las siglas del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa; permanecieron calladas y mostraron indiferencia sobre el drama y el sufrimiento de las familias de los colegas asesinados.

Es más, en los últimos meses, funcionarios públicos y políticos se quejan que durante varios meses, con el tema de la reforma legislativa para proteger a los periodistas oaxaqueños, personas que se dicen dirigentes de diferentes membretes se han dedicado a lucrar al pedir dinero “como apoyo” a los periodistas, llegando al grado de hacer colectas para un supuesto festival infantil que resultó un lucrativo negocio personal.

A lo largo de los años, la delegación VII del SNRP ha organizado Foros abiertos, marchas y protestas para exigir respeto a la libertad de expresión y de prensa, y ha asumido el reclamo de justicia para los familiares de las víctimas de la violencia, pero no ha lucrado ni lucrará con la tragedia de los periodistas de Oaxaca y de México.

Mientras no haya un deslinde claro de los compañeros periodistas de quienes usan las siglas y membretes para pedir dinero y denigrar la imagen del comunicador y de nuestras organizaciones, y en tanto no haya un compromiso claro y firme en la defensa de la libertad de expresión y de prensa, así como de exigir garantías para el ejercicio periodístico y de la vida de los comunicadores de Oaxaca y del país; no tendremos nada en común para participar en una SIMULACION y MANIOBRA que obedece a intereses nefastos de quienes pretenden seguir lucrando con la causa de los periodistas.

Atentamente

Comité Delegacional del Sindicato Nacional de trabajadores del la Prensa

Filadelfo Figueroa Mendoza