* El gobernador Alejandro Murat, su esposa Ivette Morán de Murat y la representante de la Diosa Centéotl 2019, Lilia López Hernández, encabezaron el convite de la Octava de los Lunes del Cerro

Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- ¡Viva Oaxaca!, ¡Viva la Guelaguetza!, fueron los gritos de júbilo que se hicieron escuchar al paso de las 26 delegaciones que este sábado anunciaron la Octava del Lunes del Cerro; la máxima fiesta de las y los oaxaqueños que desde 1932 deslumbra al mundo entero con sus danzas y tradiciones en la Rotonda de la Azucena.

El sonido de la chirimía y los cohetones abrieron paso al contingente encabezado por el gobernador Alejandro Murat Hinojosa, su esposa Ivette Morán de Murat y la representante de la Diosa Centéotl, Lilia López Hernández, originaria de Loma Bonita, municipio de la región de la Cuenca del Papaloapan.

Durante este recorrido, que inició en la Glorieta de las Águilas de la Calzada Porfirio Díaz y concluyó a la altura del templo de La Merced, las delegaciones mostraron sus danzas, cultura y tradiciones milenarias, que han hecho de la Guelaguetza, la celebración étnica más importante de México y América Latina.

De esta manera, con las melodías de las ocho regiones de la entidad interpretadas por la Banda de Música del Gobierno del Estado, Oaxaca invitó a las y los visitantes nacionales y extranjeros a formar parte de esta fiesta.

Con canastas adornadas con flores reposando sobre sus cabezas, las Chinas Oaxaqueñas -ataviadas con faldas de gran vuelo, blusa blanca y rebozo- fueron las primeras en dar color a esta fiesta, y junto con los monos de calenda, las marmotas y los faroleros que las acompañan, invitaron a bailar el tradicional Jarabe del Valle.

De la región del Istmo de Tehuantepec cautivaron las delegaciones de Ciudad Ixtepec, Asunción Ixtaltepec y El Espinal, así como la delegación huave de San Francisco del Mar con sus trajes representativos.

Ante las miradas expectantes de miles de personas que se unieron a este gran festejo de cultura y tradición, la delegación de Santiago Juxtlahuaca hizo su aparición con la Danza de los Rubios; le siguió Huautla de Jiménez con sus sones.

De la Costa, Santiago Llano Grande, Santa María Huatulco y las chilenas de Pinotepa Nacional cautivaron a los espectadores que también se concentraron desde las azoteas de las casas y algunos negocios.

Entre vivas y aplausos, hicieron su aparición los danzantes de la Pluma de Cuilapam de Guerrero y Teotitlán del Valle; posteriormente San Andrés Zautla se hizo presente con su Danza de Jardineros. Al ritmo de la jarana Loma Bonita también dio una muestra de su Fandango.

Las personas que se aglomeraron en las banquetas también disfrutaron de los bailes de Huajuapan de León; Santa Catarina Ticuá; San Vicente Coatlán; San Carlos Yautepec y San Andrés Solaga con su boda solagueña.

Durante este convite, que tuvo una duración de más de dos horas, integrantes de las delegaciones, portadores orgullosos de sus raíces, mostraron los mejores pasos de sus sones, chilenas y danzas, al ritmo de las notas musicales interpretadas por sus bandas de música de viento.

Tampoco faltó la regada de dulces, copitas de mezcal, así como productos que las delegaciones obsequiaron al público.

* Convive Alejandro Murat con delegaciones folclóricas de las ocho regiones

Previo a este convite, Murat Hinojosa y Morán de Murat convivieron con las y los integrantes de las delegaciones en la tradicional “Comida de la Hermandad”. Durante esta alegre convivencia, el jefe del Poder Ejecutivo felicitó y reconoció a cada mujer y hombre de las delegaciones por ser guardianes de la cultura milenaria de Oaxaca y preservar las tradiciones.