* La autora Sara Uribe y la ilustradora Verónica Gerber presentaron esta obra ilustrada en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia
* La presentación forma parte del programa conmemorativo por el centenario del natalicio de Castellanos
Ciudad de México.- La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través de la Coordinación Nacional de Literatura, llevaron a cabo la presentación editorial del libro “Rosario Castellanos. Materia que arde”, de Sara Uribe, en el marco de las celebraciones por los 100 años del natalicio de la escritora.
En la presentación en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia (CCLXV) participaron la autora Uribe y la escritora e ilustradora de la obra, Verónica Gerber, quienes compartieron detalles del proceso creativo de este libro, que explora la vida y el legado de una de las figuras más influyentes de la literatura mexicana.
Durante su intervención, Uribe explicó que “Rosario Castellanos. Materia que arde” tiene como propósito acercar a nuevas generaciones a la vida y obra de la autora de Balún Canán (1957): “es para cualquier lector que no conozca mucho la obra de Castellanos. No creí que al releer todas sus obras -que me tomó año y medio- tenía que incluir todas sus obras, pero así fue”.
La también autora de “Lo que no imaginas… (2005)” señaló que, gracias a la recomendación temprana de Gerber, pudo obtener una lectura más consciente de la obra de Castellanos: “Porque me dijo ‘de lo que vas leyendo, ve encerrando los objetos que encuentres’. Entonces el proceso de hacer una lectura material de la obra de Castellanos, me lo regaló esa petición de Verónica y yo no hubiera tenido la misma lectura que tuve si no hubiera estado muy consciente de qué tipo de materialidades habitaban la obra de Castellanos. Entonces cada dibujo es reflejo de una enorme cosmovisión”.
Sobre el título de la obra, la también autora de “Nunca quise detener el tiempo” (2007) señaló que el fuego es una metáfora importante en la escritura de Castellanos, ya que al lado de este elemento siempre aparecen revelaciones: “El fuego es un elemento revelador en su obra, que habla de la pasión con la que ella vivía -sus anhelos, sus deseos, sus búsquedas, su propia vida personal-, pero también es un elemento que iluminan cosas que a primera vista no se ven -tanto el fuego como el relámpago-. Por eso es que quise ponerle Materia que arde”.
Gerber expuso que la lectura de “Oficio de tinieblas” de Castellanos fue muy importante para ilustrar la obra presentada, ya que consideró que cuenta con varias materialidades: “De ese ese libro, que yo no había leído antes, saqué esta idea de los materiales y de los objetos, que después fue muy importante para la resolución de las ilustraciones que acompañan la escritura de Sara, y también el que Sara me dejó ir leyendo conforme iba escribiendo cosas”.
La también autora de “Conjunto vacío” (2015) expuso que le impresionó cómo Castellanos lidió con la complejidad del indigenismo en México, por lo que ella también quiso atravesar por esa brecha: “Me impresiona cómo Rosario, desde su escritura, enfrentó lo que entonces se llamaba indigenismo y las complicaciones de escribir desde su propia posición. Yo también quise atravesar esa complejidad, lo cual implicó usar iconografía de Chiapas, con todas las consecuencias que eso puede conllevar”.
El pasado jueves, Mariel Damián, titular del Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, moderó la presentación editorial de “Rosario Castellanos. Materia que arde”.