Washington, Estados Unidos.- La delegación mexicana reconoció los retos que el Estado mexicano enfrenta en materia de migración y asilo en las circunstancias actuales al ser el país donde convergen las cuatro dimensiones de la migración (origen, tránsito, destino y retorno), durante la audiencia pública de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en el marco de su 173 periodo de sesiones que se celebra del 23 de septiembre al 2 de octubre.

En la sede de la CIDH, afirmó que el Estado mexicano prioriza el respeto y la protección de los derechos humanos de todas las personas migrantes que ingresan a territorio nacional, en cada una de estas etapas por lo cual expresó su apoyo irrestricto al Pacto Mundial para una Migración Ordenada, Segura y Regular.

Se reiteró que históricamente se ha impulsado un enfoque de la migración centrado en la persona, con especial atención a las personas en situación de vulnerabilidad, como niñas, niños y adolescentes (NNA), mujeres, indígenas, personas con discapacidad, adultos mayores y las personas de la comunidad LGBTI.

Igualmente, la delegación mexicana destacó que una de las acciones prioritarias de esta administración es la ejecución del Plan de Desarrollo Integral (PDI) entre México, El Salvador, Guatemala y Honduras para abordar las causas estructurales de la migración y generar, además de un sentido de corresponsabilidad regional, un mayor desarrollo en la región.

Con ello se busca promover que la migración sea una opción y no una necesidad, impulsando iniciativas que mejoren el desempeño económico mediante la generación de ingresos y la creación de empleos dignos y decentes.

Se mencionó que el contexto actual ha ocasionado un aumento de los flujos migratorios en su tránsito por México, entre los cuales se encuentran un número significativo de solicitantes de la condición de refugiado y personas con necesidades de protección internacional, provenientes principalmente del norte de Centroamérica.

Ante este panorama, México promueve el desarrollo de soluciones regionales basadas en la responsabilidad compartida, el diálogo, la cooperación y en la atención y prevención de las causas que promueve la huida de las personas de sus países de origen y la búsqueda de protección internacional.

En congruencia con lo anterior, México ocupa la primera presidencia pro tempore del Mecanismo Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS), como complemento subregional al Pacto Mundial de Refugiados.

Al reconocer la importancia de un diálogo serio y constructivo en el marco de la audiencia pública con la CIDH y las organizaciones de la sociedad civil, el Gobierno de México expresa que continuará promoviendo y protegiendo los derechos humanos de los migrantes y asilados, erradicando todo tipo de expresiones xenófobas, de discursos de odio y de actos de discriminación.

Encabezan la delegación mexicana: el subsecretario para América Latina, Maximiliano Reyes; la subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado y el titular de la COMAR, Andrés Ramírez.